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Amman, o en español Amán, es la capital de Jordania. Una ciudad con una rica historia que se remonta a miles de años. La ciudad está llena de ruinas antiguas, museos y lugares de interés cultural. Aquí te dejamos 10 cosas imprescindibles que no puedes perderte en tu visita a Ammán. Fue nuestro comienzo de nuestra ruta de 10 días por el reino jordano, primer país de Oriente Medio que pisábamos.
También fue el inicio de un viaje espectacular e inolvidable. Si dispones de poco tiempo en la ciudad o quieres tener un primer contacto siempre podéis empezar con un free tour. No entendemos a ciencia cierta muy bien porque la gente se salta esta ciudad y no la incluye en su plan de viaje y se va directo a otros lugares. Una ciudad que perfectamente puedes dedicarle un día o si quieres ver lo más bonito que está en el centro con una mañana o una tarde también valdría. Como ventaja a esto es que puedes disfrutar de una preciosa ciudad sin agobios ni masificaciones. Aquí va nuestro top 10 de imprescindibles.
1. Ciudadela de Amman
Esta antigua ciudadela, situada en lo alto de una colina, ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad. Por ello es el mejor lugar para empezar nuestra visita por Amán. Te encuentras en lo más alto y de ahí proseguiremos la ruta de la ciudad caminando cuesta abajo.
Una vez dentro encontrarás el Templo de Hércules, el Palacio Omeya y el Museo Arqueológico de Jordania. Es un yacimiento arqueológico situado en la colina Jabal al-Qal’a, en el centro de Amman.
Está considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es uno de los lugares más visitados de la ciudad. La ciudadela ha estado habitada durante más de 7.000 años y ha sido testigo de la historia de Jordania.
Aquí se han encontrado restos de las civilizaciones griega, romana, bizantina y omeya. La entrada es gratuita con el Jordan Pass. Si no la tienes el precio son 3 dinares jordanos. El horario de visita es de 8:30 a 17h excepto viernes y festivos que es de 9 a 16h. Nos ofrecieron una visita guiada de unas 2 horas por la ciudadela por 35 dinares 2 personas. No la hicimos ya que preferimos hacerla a nuestro aire, pero un apunte como información por si estáis interesados.
2. Teatro Romano
Este anfiteatro romano del siglo II es uno de los lugares más emblemáticos de Amman. Se utiliza para eventos culturales como conciertos u obras de teatro. En ocasiones es iluminado con luces de colores durante la noche, dando un encanto muy especial al lugar. El teatro tiene capacidad para 6.000 espectadores y está construido en una colina, lo que ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad.
El escenario está decorado con columnas y nichos, y el suelo está cubierto de piedras blancas. La entrada es gratuita con el Jordan Pass. En caso de no tenerla el precio de entrada son 2 dínares jordanos. El horario de visita es de 8 a 20h. También se encuentran dentro dos museos, el folclórico y el de tradiciones populares, están incluidos en la entrada al teatro. Tampoco tienen muchos exponentes pero si el calor pega bien merece entrar y descansar un poco ya que en el teatro tiene pocas sombras.
Si queréis subir a lo alto y obtener una fotografía como esta os doy un consejo para que no os pase como a mí, cuando paséis la puerta debéis de subir mejor por el lado izquierdo (lado derecho de la fotografía). Hay mejores escalones que en el otro lado y aunque subir es cansado te agotarás menos y acabarás antes.
Una vez arriba puedes contemplar durante un largo momento las vistas que tiene, desde donde se ven los dos suficientes lugares que vienen después, el 3 y 4.
3. Odeón
Este teatro romano más pequeño fue construído en el siglo II. Se utilizaba para actuaciones musicales y declamaciones. El Odeón está construido en una colina y ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad. El escenario está decorado con columnas y nichos, y el suelo está cubierto de piedras blancas. El horario de visita es de 8 a 21h y la entrada es gratuita con la entrada al teatro.
A pesar de su pequeño tamaño es de los lugares más fotografiables de todo Amán.
4. Plaza Hachemita
La Plaza Hachemita es una plaza pública ubicada también en el centro de Amman.
La plaza fue construida en 1930 y lleva el nombre de la dinastía hachemita, que gobierna Jordania desde 1921. Está decorada con fuentes, jardines y una estatua del rey Abdullah I de Jordania.
Es un lugar popular para relajarse y pasar el rato. Encontramos varios bancos donde podrás sentarte y disfrutar de las vistas de la ciudad.
5. Mezquita Al-Hussein
Seguimos por el centro y ahora nos toca la Mezquita Al-Husseini es una mezquita. Fue construida en 1923 en honor del Sharif Hussein bin Ali, el líder de la Gran Revuelta Árabe.
Es un edificio de estilo otomano con una cúpula de color azul. Tiene dos minaretes, uno de 70 metros de altura y otro de 35 metros de altura. Es un lugar importante para la comunidad musulmana de Ammán. Se utiliza para la oración, la enseñanza y las celebraciones religiosas.
Mala suerte tuvimos en nuestra visita ya que se encontraba en obras por lo que no pudimos verla en su máximo esplendor.
6. Rainbow Street
La calle se encuentra en el distrito de Jabal al-Weibdeh y se extiende desde la Plaza Hachemita hasta la Primera Circunvalación de Amman. Puedes ir caminando una vez que hayas visitado todo el centro aunque tienes una dura subida por escaleras. Para los más perezosos siempre podemos optar por la alternativa del Uber o taxi por unos 2 dinares jordanos. Está llena de edificios de la época otomana y francesa, muchos de los cuales han sido pintados de colores vivos.
Rainbow Street es un gran lugar para encontrar souvenirs de Jordania. Hay tiendas que venden alfombras tejidas a mano, joyas tradicionales, cerámica y otros artículos artesanales. También hay una gran variedad de restaurantes que sirven comida local e internacional. También tienes algunas que otras bocacalles con preciosos coloridos como la calle Ahmad Ben Tolon.
Los cafés de Rainbow Street es un buen lugar para relajarse, tomar un café o un té. Muchos de los cafés tienen terrazas al aire libre donde puedes disfrutar de las vistas de la calle y la ciudad.
Es un lugar animado y vibrante, siempre encontrarás gente en sus coloridas fachadas.
7. La Mezquita del Rey Abdullah I
Dejamos la zona céntrica de Amán y nos vamos a visitar la Mezquita del Rey Abdullah I. Fue construída entre 1982 y 1989 en honor al rey jordano Abdalá I. La mezquita es un importante lugar de culto para los musulmanes de Jordania y está abierta a visitantes no musulmanes.
Está ubicada en la colina Jebel al-Weibdeh en la parte occidental de Ammán, alejada del centro. Es un edificio octogonal con una cúpula central de mosaicos azules. La mezquita tiene capacidad para 3.000 personas.
El interior de la mezquita está decorado con mosaicos, mármol y madera tallada. El mihrab, el nicho que señala la dirección de La Meca, está decorado con mosaicos de colores brillantes. El mínbar, la plataforma desde la que el imán da el sermón, está hecho de madera de caoba.
Para acceder a ella la entrada es de 2 dinares jordanos por persona. Hay que seguir unas normas también para entrar en su interior, los hombres no pueden ir con pantalones cortos y lo mismo para las mujeres, que además deben cubrir su cabello con un velo. Si vais en verano de corto no os preocupéis ya que tienen túnicas y velos en la entrada. Las mujeres que hay allí amablemente te acompañan a una habitación y te facilitan la ropa. En la tienda también tenemos muchos souvenirs del país, gente que muy agradable que nos invitaron a un vasito de té.
8. El zoco de Amman
En el centro de la ciudad tenemos un laberinto de calles estrechas y sinuosas llenas de tiendas, puestos de mercado y cafeterías. Es un lugar animado y bullicioso donde se puede encontrar de todo, desde recuerdos hasta especias y productos frescos.
El zoco está dividido en varias secciones, cada una especializada en un tipo de producto. La sección de especias es particularmente fragante, con montones de canela, azafrán y cúrcuma. La zona de textiles está llena de telas coloridas y alfombras tejidas a mano. La sección de artesanías ofrece una variedad de artículos, como tallas de madera y cerámica. También tenemos la zona del zoco del oro llena de joyerías.
El zoco es un lugar perfecto para experimentar la cultura y la vida cotidiana de Amman. Es un lugar donde puedes regatear con los vendedores, probar la comida callejera local y simplemente pasar el rato y observar a la gente. Nosotros compramos fruta y frutos secos. Sobre todo los frutos secos estaban buenísimos, un mix de anacardos, pistachos, almendras y algunos más que hizo muy amena la parada.
9. La gastronomía jordana
Como bien sabéis si seguís nuestra página web o nuestro canal de youtube nos apasiona la comida. Aunque la probamos durante todo el viaje por el país, en Amán fue el comienzo de descubrir una rica y variada gastronomía.
El plato nacional de Jordania es el mansaf, un plato de origen beduino que lleva arroz envuelto en una fina capa de pan con cordero. El arroz además está especiado y acompañado con almendras, también se le añade un salsa de yogur salado. Nos dijeron que se comía con la mano y eso hicimos.
Unos cuantos platos más probamos, musakhan que me encantó relleno de pollo. Kuftha que es una especie de albóndiga o el sajeyeh salteado de verduras con pollo. Hay muchísimos más, por lo que daría para una nueva entrada en el blog.
Y no sólo hablamos de platos salados. El kanafeh es un pastel típico del Medio Oriente, empapado en jarabe de agua de rosas, hecho con kadaif (cabello de ángel), queso akawi, mantequilla y pistachos o nueces. Puedes degustarlo por menos de un dinar en pleno centro.
También mencionar a su plato fast food más degustado y solicitado en Jordania, el shawarma. Una especie de Kebab que puede ser de pollo o ternera con una rica salsa.
10. Excursión a Jerash
Aunque no se encuentra en la ciudad de Amman una excursión desde aquí es un imprescindible. A tan solo 50 minutos podemos observar una antigua ciudad romana de las mejores conservadas en el mundo.
Jerash fue fundada en el siglo IV a. C. por colonos griegos. Durante el Imperio Romano, la ciudad se convirtió en una próspera metrópolis, con una población de hasta 100.000 habitantes. Era un importante centro comercial y cultural, y estaba conectado por una red de carreteras con otras ciudades del Imperio Romano.
Las ruinas de Jerash incluyen un anfiteatro, un templo, un teatro, un mercado y una variedad de otros edificios públicos. El anfiteatro, que podía albergar hasta 15.000 espectadores, se utilizaba para espectáculos de gladiadores y otros eventos. El templo de Artemisa, dedicado a la diosa griega de la caza, es uno de los edificios mejor conservados de la ciudad. El teatro, que podía albergar hasta 3.000 espectadores, se utilizaba para representaciones teatrales y musicales. El mercado, que se extendía por más de 500 metros, era el centro comercial de la ciudad.
Fue abandonada en el siglo VII d. C., pero las ruinas fueron redescubiertas en el siglo XIX. Las excavaciones arqueológicas han continuado desde entonces, y se han descubierto muchos nuevos hallazgos.
El horario de visita es de 8 a 18h y el precio es de 10 dinares jordanos. Con la Jordan Pass la entrada es gratuita. Puedes contratar un guía por unos 20 dinares que te explicará durante las 3 horas de visita la historia del lugar, pero será en inglés. También puedes contratar la visita con transporte incluido en español aquí. Como cosa positiva es que en ella también visitas el castillo de Ajlun y el Mar Muerto.
Y eso es todo, esperamos que si habéis pensado en visitar Jordania os haya convencido para que le deis una oportunidad. Aunque no llegue a maravillas como Petra o Wadi Rum tiene muchos atractivos que bien merecen una visita. Si queréis conocer más acerca de Jordania no os perdáis nuestra guía. Te dejamos el vídeo de nuestro canal de Youtube en el paso por la ciudad para que le pongas imágenes a lo que te contamos. Si nos regalas un like eso nos ayuda a seguir creciendo.
